Dietrich Bonhoeffer creó la expresión "gracia barata" como una forma de resumir el abuso de la gracia.
Él vivió en la Alemania nazi y lo abrumaba la cobardía con la que reaccionaban los cristianos ante las amenazas de Hitler. Los pastores luteranos predicaban la gracia los domingos desde el púlpito y después, callaban el resto de la semana, mientras los nazis continuaban con su política de racismo, eutanasia y genocidio.
Este libro, El costo del discipulado, es una invitación a reflexionar sobre el llamado a la conversión, al discipulado comprometido y a nuestra disposición de asemejarnos a Cristo.