La oruga Lucía heredó emociones parecidas a las de la mariposa Natalia: sentía vergüenza... ¡Mucha vergüenza!Con la ayuda de Margarita, la oruga sabionda, consultó a Carmela, una hadita buena que ayudaba a los insectos y bichitos del lugar.¿Qué te parece? La hermosa Lucía, ¿habrá resuelto el sentimiento de vergüenza?Te invito a leer la historia: "Una oruga vergonzosa"