La habilidad del escritor para integrar el paralelismo entre dos mundos, el real y el ficticio, es notable. Con precisión y armonía, nos guía a través de un viaje que explora tanto lo imaginable como lo inimaginable en la lucha contra las adversidades de la vida humana. Utiliza detalladas descripciones para crear ambientes idílicos, invitándonos a sumergirnos en la lectura con intensidad y manteniéndonos atentos a cada situación planteada. Es, sin duda, una obra que invita a reflexionar sobre nuestra existencia. El autor por medio de la figura de Juan Peldaño cobra vida, quien de ser un hombre común lo exacerba con un destino extraordinario. En este relato el bien y el mal luchan en el ámbito de la existencia, y Juan, lleno de virtudes creadas en la fantasía del autor, era el baluarte contra la maldad. Con cada palabra escrita, el autor conduce la escritura hacia situaciones inverosímiles, creando un relato intenso y fascinante desde el principio hasta el final