
En TRAUMAS Y SECUELAS EMOCIONALES EN VÍCTIMAS DE ABUSO INFANTIL, la Dra. Cynthia González nos guía en un recorrido minucioso, resaltando que el abuso sexual infantil, particularmente cuando se produce en el ámbito familiar, necesita analizar la relación entre la víctima y el perpetrador, junto con la importancia del contexto en el que tiene lugar, para entender el efecto y las consecuencias del abuso. Si bien el acontecimiento puede permanecer en la memoria durante un periodo, podría volver a surgir y tener un impacto en la vida de la víctima en cualquier momento, forzándola a enfrentar lo que significa para ella y su familia comunicar sobre el incidente.
Mediante la lectura de este libro, se podrá comprender el profundo impacto que una víctima de abuso sexual en la infancia puede experimentar, lo que puede dar lugar, a corto o largo plazo, al Síndrome de Estrés Post Traumático, comúnmente conocido como PTSD (TEPT), el cual se manifiesta en diferentes etapas dependiendo del grado de trauma que la víctima haya sufrido. El abuso, sin lugar a dudas, genera una ruptura en los vínculos emocionales que existen entre la persona afectada y su hogar, el cual constituye el ambiente esencial para su desarrollo. El regreso simbólico a ese lugar a través de la cartografía emocional, aunque deja una huella significativa, resulta esencial para entender las consecuencias en la confianza, tanto personal como colectiva de la víctima, en su mente, en sus relaciones y en su personalidad; poniendo de relieve una herida que necesita cuidado y que puede ser atendida mediante el arte, como forma de comunicar lo vivido. Así, el trauma asociado con el abuso sexual en la niñez puede expresarse y romper el silencio mediante la práctica artística, especialmente en la performance, donde el cuerpo juega un papel significativo. Esto permite a la víctima reclamar su derecho sobre su propio cuerpo, ofreciendo recursos para empoderarse y tratar un tema que necesita ser comunicado y denunciado.