Antón Pávlovich Chéjov fue un médico, escritor y dramaturgo ruso. Encuadrable en la corriente Realista Psicológica, fue maestro del relato corto, siendo considerado como uno de los más importantes escritores de cuentos de la historia de la literatura. Como dramaturgo escribió unas cuantas obras, de las cuales cuatro son las más conocidas, y sus relatos cortos han sido aclamados por escritores y crítica. Chéjov compaginó su carrera literaria con la medicina; en una de sus cartas escribió al respecto: La medicina es mi esposa legal; la literatura, solo mi amante. Al principio Chéjov escribía simplemente por razones económicas, pero su ambición artística creció, introduciendo innovaciones que han influido en la evolución de los relatos cortos. Su originalidad consiste en el uso de la técnica del monólogo, adoptada más tarde por James Joyce y otros escritores del modernismo anglosajón, además del rechazo de la finalidad moral presente en la estructura de las obras tradicionales. No le preocupaban las dificultades que esto planteaba al lector, porque consideraba que el papel del artista es realizar preguntas, no responderlas. Según el escritor estadounidense E. L. Doctorow, Chéjov posee la voz más natural de la ficción, sus cuentos parecen esparcirse sobre la página sin arte, sin ninguna intención estética detrás de ellos. Y así uno ve la vida a través de sus frases.